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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció este lunes una ofensiva política y legislativa para “proteger y fortalecer el sistema universitario español”. En un acto celebrado en la sede de Escuelas Pías de la UNED en Madrid, bajo el lema “En defensa de una universidad de calidad, clave para el ascensor social”, el jefe del Ejecutivo presentó dos medidas clave: una inversión millonaria para relanzar la UNED y una reforma urgente de los criterios de creación y autorización de universidades.
“El Gobierno va a dar la batalla en defensa del sistema universitario español”, afirmó Sánchez. “Vamos a defender su calidad, su equidad y su prestigio. Y por supuesto, vamos a romper una lanza a favor de lo público, sin demérito de aquellas instituciones privadas que sí funcionan bien, con rigor y calidad”.
La primera medida anunciada es un ambicioso Plan de Relanzamiento de la UNED, que contará con una inyección inicial de 30 millones de euros, un 35% más de lo habitual. “Queremos que la UNED sea la universidad de referencia en España en enseñanza virtual pública y de calidad”, explicó el presidente, quien destacó que se impulsará una renovación tecnológica integral, la creación de 2.000 nuevas plazas en titulaciones como Inteligencia Artificial o Neurociencias, y la ampliación de 5.000 plazas en grados y másteres habilitantes.
Una universidad no puede ser una máquina expendedora ni una fábrica de títulos sin garantías
La segunda medida, aprobada por el Consejo de Ministros para su tramitación urgente, es el endurecimiento de los criterios de creación, reconocimiento y autorización de universidades. “Una universidad no puede ser una máquina expendedora ni una fábrica de títulos sin garantías”, sentenció Sánchez.
Entre las novedades, destacó que se exigirá una “masa crítica mínima de 4.500 estudiantes en los primeros cinco años”, así como experiencia en gestión universitaria y un 10% de plazas de alojamiento para el estudiantado. Además, la autorización de universidades online requerirá la aprobación de las Cortes Generales.
“Vamos a perseguir las prácticas que atenten contra el prestigio de nuestras universidades, públicas y privadas”, dijo el presidente, que insistió en que “solo podrán ser autorizadas aquellas que cumplan con nuestros estándares de calidad”.
Sánchez alertó también sobre los intentos de “fragmentar y privatizar” la educación superior. “Nuestro sistema universitario público está en riesgo. Hay quienes están dispuestos a que la igualdad de oportunidades deje de estar garantizada”, denunció. Y apuntó directamente a los gobiernos autonómicos de Madrid y Andalucía: “Aquí se ha recortado casi un 30% la financiación desde 2016; allí, el presupuesto lleva seis años congelado”.
Según el presidente, esta estrategia busca “debilitar lo público para justificar su privatización”. Y criticó la proliferación de “chiringuitos educativos”: “Mientras se ahoga a las universidades públicas, se extiende una alfombra roja a centros creados solo para hacer caja”.
Finalmente, pidió a la ciudadanía “unirse en la movilización en defensa de lo público y de la igualdad de oportunidades”, recordando que la universidad pública ha sido “el gran ascensor social” del país. “De todos depende que ese ascensor no se vuelva a detener nunca más”, concluyó.
