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En casi ninguna biografía del gran filólogo del Centro de Estudios Históricos de la Junta para ampliación de Estudios, no solo no se le reconoce como secretario de dicha JAE durante la guerra de España, sino que tampoco se le reconoce como consejero del "Consejo Superior de la República".
Esta institución, que se creó para "unificar eficientemente los diferentes organismos de la vida cultural, artística y científica dependiente del Ministerio de Instrucción Pública y Sanidad, (Fernando de los Ríos.
Hay un hilo conductor de la existencia de la actividad continuada, cultural, docente y científica de la II República del Frente Popular
Durante todos estos años de la guerra, en cambio la JAE mantuvo su actividad constante, y pasó a formar parte del Consejo Nacional de Cultura de la República (como puede leerse en el acta de la sesión de 8 de octubre de 1938 de la JAE en Barcelona). En este contexto tan inestable, todavía tuvieron el valor, personajes como Tomás Navarro Tomas, de aceptar ser consejero en representación de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza (Gaceta de la República. 17 de octubre de 1938).
Por esas dramáticas fechas, también en octubre de 1938, TNT, nombra a Luis Calandre Ibáñez, director del Hospital de Carabineros, situado en la Residencia de Estudiantes, subdelegado de la JAE en Madrid.
Todavía, la Real Academia Española, de la que fue nombrado académico, con la toma de posesión 19 de mayo de 1935, letra h, pese a mis reiteradas quejas, no incluye a TNT como secretario de la JAE (1936-39), ni como Consejero del Consejo Superior de Cultura de la República (1938-39).
Tengo entendido que la reciente exposición "Los Machado, retrato de familia", inaugurada por el Rey y comisariada por Alfonso Guerra, en Sevilla, luego irá a Burgos, y en junio se presentará, en la RAE, ¡en Madrid!
Una institución, que ahora depende, como el resto de las reales academias-Instituto de España, del Ministerio de Ciencia y Universidades, y de sus subvenciones, y que no reconoce la verdadera historia de sus académicos, uno tan importante, como Tomás Navarro Tomás.
Hay un hilo conductor a través de él, a lo largo de la guerra, y en los diferentes organismos, que hemos comentado antes, que le hace ser prueba fundamental, de la existencia de la actividad continuada, cultural, docente y científica de la II República del Frente Popular, y la Constitución de 1931, y por ello muy peligroso para esas reales academias, que están incluso, protegidas por la Constitución monárquica de 1978.